martes, 11 de junio de 2013

Izquierda Unida plantea en Alternativas desde Abajo una candidatura única para las europeas. LA ALTERNATIVA.


El pasado día 25 de mayo el Consejo Político de Izquierda Unida decidía abordar un proceso de convergencia con todos los movimientos sociales nacidos del 15-M y con el resto de partidos de izquierda. Y el secretario ejecutivo de Convergencia Política y Movimientos Sociales de IU, Enrique Santiago, lo habló ayer en las jornadas públicas impulsadas por Alternativas desde Abajo. “IU estaría dispuesta a [formar parte de] una candidatura única con los movimientos sociales y otras fuerzas políticas, y lo he propuesto. Para las elecciones europeas (junio de 2014) es importante conseguir una candidatura que represente a un amplio espectro social y político. Hay que discutir propuestas de forma abierta. ¿Que consigues alianzas?: perfecto. ¿Que no? Ya se verá si se pueden plantear alianzas después de las elecciones”, explica.
Enrique Santiago es uno de los varios miembros de IU, de Equo, de Izquierda Anticapitalista y de otros partidos, de movimientos ecologistas, de mareas ciudadanas, del 15-M, del 25-S, de Democracia Real Ya, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, de otras plataformas, que se han reunido este fin de semana en Madrid bajo el lema, o quizá pregunta: ¿Cómo construir alternativas desde abajo?
– Lo que no quiero es que mañana escribas en el titular que proponemos a cualquier otro partido una alianza, ni a Izquierda Anticapitalista, ni a Equo ni a nadie. Esto es otra cosa-, advierte.
 ¿Está IU dispuesta a diluir sus siglas entre otros partidos y movimientos ciudadanos para lograr esa candidatura única?
– No. No te confundas. Ningún proceso de convergencia pasa por ninguna sigla. Nadie ha hablado de disolver ninguna sigla ni nada. Hemos hablado de sumar.
El hecho de que IU pueda acercarse a Alternativas desde Abajo, es uno de los mayores elementos de debate dentro de este movimiento que ni quiere siglas ni líderes. Y que este viernes y este sábado reunió en Madrid a cerca de 500 personas. Para muchos, IU no es más que otro partido tradicional, con sus siglas, sus subvenciones, sus verticalidades y sus exconsejeros de cajas de ahorro, implicados en la estafa de las preferentes. Lo confirma Jorge Aranda, activista de Marea Blanca (Sanidad), y presente en las jornadas recién clausuradas de Alternativas desde Abajo: “A mí, que IU se acerque a este movimiento, me parece una noticia excelente. Pero es verdad que hay gente que lo ve bien y gente que lo ve mal”.

Tania Sánchez, diputada de IU en la Asamblea de Madrid y también presente en las jornadas, es muy prudente con ese posible consenso: “Yo creo que lo más positivo de estas jornadas es ver que el movimiento tiene un alto consenso para intervenir en la política, para disputar el poder. Pero hay que hacerlo despacito. Hay que ir con cuidadito. Por la situación de crisis, por la cantidad de gente que está pasándolo muy mal, hay cierta sensación de urgencia. Pero no sé si en las elecciones europeas podrá unirse todo el mundo. Quizá, si en principio no es posible una candidatura unitaria, pueda ser posible después converger. La urgencia social y política del momento tiene que estar por encima de cualquier sigla. Debemos buscar un espacio unitario”.
Todos los entrevistados, antes de contestar al periodista, le han echado en cara que centre sus preguntas sobre pactos políticos, siglas, elecciones, titulares llamativos… Un interlocutor, de Ecologistas en Acción, llega incluso a afirmar: “No digas que soy de Ecologistas en Acción. Di que soy un activista de la ecología y ya”. La consigna es que ninguna sigla ensombrezca un proyecto que nace desde abajo. Que pretende afinar y hacer operativo el modelo asambleario y horizontal del 15-M.
Temas que realmente se trataron durante estos dos días en Madrid y que, a pesar de ser los esenciales, no ofrecen al periodista un titular:
  1. Extender el debate a otros territorios, en el ámbito local, provincial, etc. Algo que ya se viene haciendo, pero no tanto.
  2. Planificar la resistencia.
  3. Conseguir que la autogestión pueda ir sustituyendo, mientras continúan las políticas neoliberales, los servicios por ejemplo sanitarios o educativos de los que se está privando a los ciudadanos.
  4. Creación de redes de solidaridad para ayudar a la gente que está viviendo situaciones amargas.
Fuente: cuartopoder.es



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